NOTICIAS

CÓMO CAMBIARAN LAS OFICINAS Y LA MANERA EN LA QUE TRABAJAMOS GRACIAS AL COVID-19

En los últimos meses, la manera en la que vivimos se ha visto afectada enteramente por la llegada de lo impredecible: el COVID-19. Gracias a esta pandemia, no solo se han paralizado numerosas industrias a nivel mundial, sino que el confinamiento masivo ha desencadenado un debate profundo sobre el futuro del trabajo.

A pesar de que el trabajo remoto ha venido creciendo en popularidad desde hace unos años (en Estados Unidos se determinó un incremento del 159% en las personas que trabajan desde sus casas entre el 2005 y 2017) y se proyectaba la adopción de este sistema en un futuro, el coronavirus presentó un nuevo desafío para aquellas empresas que no estaban preparadas para trasladar su fuerza laboral a sus hogares correspondientes o incluso realizar la mayor parte de sus responsabilidades digitalmente.

Oficina en Proyecto Residencial Apto PHC, Valencia, Venezuela.

Sin embargo, este gran experimento global de “trabajo en casa” ha sido un catalizador sustancial para que numerosas empresas hayan reconocido los múltiples beneficios de los espacios de trabajo flexible. Los empleados invierten menos tiempo y dinero para desplazarse, obtienen un mejor equilibrio entre la vida laboral y personal y se desenvuelven en una atmósfera confortable y productiva; resultando en un aumento en la productividad y la satisfacción laboral además de reducción de costos en la oficina principal.

Si bien la tipología tradicional de la oficina permanecerá vigente, en un mundo post-pandémico las empresas adaptarán su estructura a un esquema híbrido de trabajo que modificará últimamente la manera en la que laboramos. Estas adaptaciones darán inicio a un nuevo conjunto de consideraciones arquitectónicas tanto para las nuevas oficinas como para los hogares actuales; ya que inevitablemente ambos espacios deberán evolucionar para satisfacer las necesidades influenciadas por el trabajo remoto.

En la oficina

En un futuro próximo, se pudiera predecir que el diseño de interior de las oficinas será cada vez más flexible, pero garantizando que la densificación tome un descanso como práctica común. Los nuevos protocolos COVID-19 requerirán una mayor separación física en los lugares de trabajo: las estaciones estarán más separadas, las salas de conferencia se encontrarán desaprovechadas y el 40% del espacio que solía utilizarse será inhabilitado gracias a la alta rotación del personal. Esto implica que las grandes industrias buscarán minimizar y optimizar los espacios para aquellas actividades que solo pueden ser ejecutadas en persona en horarios restringidos.

Al ser el distanciamiento social el nuevo estándar, las salas de conferencia no solo se reducirán considerablemente en tamaño al punto en donde se convierta en un espacio confinado individual, sino que se deberán desarrollar ampliamente a nivel tecnológico para cumplir con la alta demanda de conexiones digitales. Este módulo autónomo cerrado cumplirá con una excelente insonorización para aumentar el aislamiento acústico y garantizar que el espacio sea confortable y acogedor al momento de ejecutar videoconferencias.

En el hogar

A pesar de que la domótica ha sido un campo que poco a poco ha ido ganando reconocimiento en el mundo del diseño de interior, todavía se encuentra subrepresentado a pesar de que posee un proceso de implementación relativamente fácil. Viendo como el contacto físico ha sido el punto focal en la propagación de la enfermedad, es tiempo de que la domótica se establezca como un pilar fundamental en los futuros hogares. Mediante el uso de un sistema de comando central instalado en tu teléfono o tableta o un sistema de control por voz, podrás controlar de forma remota diversas funciones del hogar. Gracias a la automatización, se podrá reducir eficazmente la posibilidad de contagio a través de las áreas que con frecuencia se ven afectadas por el contacto; lo que minimiza significativamente las concentraciones microbianas y, últimamente, la contaminación y la propagación. Junto con todos los beneficios inherentes de la domótica, está la tranquilidad del usuario; ya que no sentirá la persistente amenaza de infección al apagar un interruptor de luz en su propia casa.

Oficina en Proyecto Residencial Apto PHC, Valencia, Venezuela.

La organización espacial deberá satisfacer la creciente necesidad de que las oficinas privadas sean una parte integral del hogar: ya no será suficiente un escritorio con una silla simple y una lámpara. Gracias a las nuevas rutinas desafiantes y con la nueva posibilidad de que el trabajo remoto se convierta en la nueva norma, la oficina en casa deberá ser una habitación aislada que le otorgue al empleado todas las comodidades para ejecutar sus responsabilidades de forma óptima.

Si esta tendencia continúa y se fortalece en el tiempo, la transición del trabajo colectivo al remoto reconfigurará por completo no solo la manera en la que nos desenvolvemos en nuestras labores cotidianas, sino que se modificarán por completo las consideraciones arquitectónicas que se han considerado estándar para el diseño de oficinas y de nuestros hogares; probando que el impacto de la pandemia tendrá un efecto perdurable en la forma en la que vivimos.